martes, marzo 25, 2008

Vigilia Pascual en Parroquia de Concón

Vigilia Pascual

La celebración es el sábado por la noche, es una Vigilia en honor del Señor, según una antiquísima tradición (Ex. 12, 42), de manera que los fieles, siguiendo la exhortación del Evangelio (Lc. 12, 35 ss), tengan encendidas las lámparas como los que aguardan a su Señor cuando vuelva, para que, al llegar, los encuentre en vela y los haga sentar a su mesa.
La Vigilia Pascual se desarrolla en este orden:

' Primera Parte: Breve Lucernario

Se bendice el fuego. Se prepara el cirio en el cual el sacerdote con un punzón traza una cruz. Luego marca en la parte superior la letra Alfa y en la inferior omega, entre los brazos de la cruz marca las cifras del año en curso. A continuación se anuncia el Pregón Pascual.

' Segunda Parte: Liturgia de la Palabra

En ella la Iglesia confiada en la Palabra y la promesa del Señor, media las maravillas que desde los comienzos realizó Dios con su pueblo.

' Tercera Parte: Liturgia Bautismal

Se llama a los catecúmenos, quienes son presentados ante el pueblo por sus padrinos: si son niños serán llevados por sus padres y padrinos. Se hace la renovación de los compromisos bautismales.

' Cuarta Parte: Liturgia de la Eucaristía.

Al acercarse ya el día de la Resurrección, la Iglesia es invitada a participar en el banquete eucarístico, que por su Muerte y Resurrección, el Señor preparó para su pueblo. En él participan por primera vez los neófitos.

Toda la celebración de la Vigilia pascual se realiza durante la noche, de tal manera que no se vaya a comenzar antes de iniciarse la noche, o se termine la aurora del Domingo.

La Misa, aunque se celebre antes de la media noche, es la Misa Pascual del Domingo de Resurrección. Los que participan en esta misa, pueden volver a comulgar en la segunda Misa de Pascua.

El sacerdote y los ministros se revisten de blanco para Misa. Prepárense cirios para todos los que participan en la Vigilia.

En la Parroquia Nuestra Señora de Las Mercedes de Concón, Se vivió la Vigilia Pascual hubo bastante concurrencia, que al final de la Eucaristia el Obispo Auxiliar Monseñor Santiago Silva,quien presidio dicha Ceremonia, agradeció a los asistentes, por el silencio y respeto que se dío sobre todo en la primera parte, agradeció también a las personas que trabajaron para que todo saliera bien, y muy en especial al Padre Mario por haberlo invitado a participar de la Semana Santa en Concón.

Les dejo estas imagenes para que en parte sean testigo de lo que se vivió ese día, para los que no pudieron asistir












































lunes, marzo 24, 2008

Vía Crucis por las Calles de Concón























Como es tradicional en Semana Santa se vive el Vía Crucis, con devoción y amor, en Concón tradicionalmente lo hacen los jóvenes de Confirmación de nuestra Parroquia, quienes lo preparan y esta vez no fue la excepción, con mucha preparación, dedicación y responsabilidad, se hicieron cargo de todo, de las lecturas, las oraciones, los cantos, la animación en general, Jóvenes que no sólo aportaron en el Vía Crucis, estuvieron en otras actividades de Parroquia, con una disposición ejemplar, sin duda que se merecen un capitulo aparte.

"Vía crucis"
son dos palabras latinas cuyo significado puede traducirse como "camino de la cruz", por ello la oración del Santo Vía crucis se llama también el Camino de la Cruz, las Estaciones de la Cruz, y la Vía Dolorosa.

Tiene su origen en la Tierra Santa. En Jerusalén, desde los comienzos del cristianismo, fue marcado el camino que siguió Jesús hasta el Calvario, así el Vía crucis representa esa peregrinación por aquellos lugares sagrados impregnados por el amor y por el dolor de la pasión de Nuestro Señor Jesucristo, por lo que se ha convertido en una de las devociones cristianas más populares.

Según la tradición, la Virgen María visitaba los lugares de la Pasión de su Hijo, por lo que podría ser considerada como una de las fundadoras del Vía crucis.

Consiste en seguir espiritualmente el camino recorrido por Jesús desde su condena a muerte hasta su sepultura, deteniéndose ante 14 escenas o estaciones para meditar sus sufrimientos y unirse interiormente con El; por ello para los cristianos es un ejercicio de piedad lleno de contenido evangélico, de agradecimiento y de amor. El Vía crucis se reza sobre todo durante la Cuaresma, aunque es muy beneficioso hacerlo con mayor asiduidad, no en vano decía San Buenaventura que "no hay otro ejercicio más a propósito para santificar un alma que la meditación asidua de los padecimientos de Cristo".